Creemos que tenemos la mejor idea del mundo, esa que nos va a impulsar, nos va a destacar, va a hacer milagros con nuestra economía. Hagamos varios ejercicios para someter cada idea y evaluar si es compatible con tu estilo de vida!
Si nuestra idea sobrevivió a la primera etapa, nos sentimos cómodas con cada ejercicio y seguimos muy motivadas, podemos decir que la IDEA está tomando FORMA. AMO cuando eso sucede, significa que se esta convirtiendo en algo real, y no tenemos idea por dónde arrancar. Tranqui! siempre hay recursos.
Esta etapa es maravillosa, y caótica. Nunca, nunca, nunca, las cosas salen como las tenemos en la cabeza. Los tiempos son tiranos, hay días que nos levantamos y nos llevamos el mundo por delante, y días en los que queremos volver a la cucha y odiamos todo el proceso. Estamos justo a la mitad, y es el momento de OR-DE-NAR-NOS!
Entusiasmadísimas!!! Y un cagazo… Esto está sucediendo, esa idea que un día apareció, está encaminada, le diste forma, planificaste el proceso, y ahora si, manos a la obra. Que arranque el show! No nos para nadie!
Una vez que el negocio está puesto en marcha, pueden surgir infinitas cosas. Que suban los precios, que aparezca un competidor, que tengas otr@ hij@, que cierren el planeta por pandemia. Que te aburras. Que no sea lo que esperabas. ¿El emprendimiento está dónde y cómo quiero que esté? ¿Qué me está faltando?, ¿Qué me está doliendo?